En Empujar, Thaler y Sunstein introdujeron los empujones como una forma de fomentar una mejor toma de decisiones sin obstruir la libertad de elección. El concepto en su conjunto despertó los intereses de gobiernos, formuladores de políticas y empresas como una forma de alentar a las personas a tomar decisiones que los impactarán positivamente sin prohibir activamente opciones alternativas.
Desde su introducción, la noción de empujar a las personas hacia decisiones positivas y más ventajosas para ellos ha sido polémica. ¿Es ético que los órganos de gobierno, los responsables políticos o las instituciones financieras decidan cómo deben elegir o pensar los consumidores y los ciudadanos? ¿Deberían los arquitectos de la elección estar en condiciones de dictar o estructurar las elecciones, considerando que ellos mismos tienen prejuicios personales? Continuamente se argumenta que los empujones y las técnicas de intervención de las ciencias del comportamiento pueden considerarse manipuladores, ya que infringen la toma de decisiones autónoma.
¿Qué es el efecto transparencia?
A medida que surge la ética en torno a los empujones y la cuestión de la transparencia, tanto los críticos como los partidarios coinciden en que los empujones y las intervenciones de las ciencias del comportamiento podrían volverse transparentes al revelar su presencia y propósito a los usuarios finales. Las investigaciones muestran que los empujones aún pueden ser una herramienta muy eficaz incluso cuando dijimos que nos estaban empujando. Ser honesto con los usuarios sobre los motivos de comportamiento no reduce los resultados y la transparencia puede, de hecho, reforzar la eficacia de los empujones.
¿Cómo pueden las instituciones financieras aprovechar el efecto de transparencia en los servicios bancarios digitales?
Los mensajes estratégicos transparentes son cruciales
Para evitar resistencia reactiva y cualquier emoción negativa asociada que pueda surgir al sentirse restringido y que se le elimine la libertad de elección, es crucial que los bancos utilicen mensajes transparentes para comunicar motivos de comportamiento y resaltar cuándo están en juego los empujones para desarrollar relaciones más profundas y de confianza con los consumidores. Ya sabemos que los empujones pueden ser muy efectivos incluso cuando somos conscientes de ellos, así que ¿no es mejor ser deliberadamente transparente y fomentar hábitos financieros saludables y sostenibles de una manera directa y honesta que evite la reacción?
Herramientas de gestión financiera personal
Al implementar Gestión financiera personal (PFM), o programas de bienestar financiero, los bancos pueden utilizar mensajes transparentes para brindar a los usuarios una mejor visión general de sus pagos salientes esperados y cómo se ve su flujo de caja. Las características de administración del dinero deben mostrar opciones y alternativas de una manera que resalte los resultados potenciales de las decisiones financieras que se toman. La mensajería transparente permitirá a los usuarios comprender mejor su toma de decisiones actual y, con suerte, fomentará mejores decisiones financieras a largo plazo.
El valor predeterminado es el estándar, pero facilita la opción de exclusión voluntaria.
La configuración de valores predeterminados es una técnica de ciencia del comportamiento muy eficaz para fomentar la aceptación del usuario. Si bien los valores predeterminados a menudo actúan como un punto de referencia para los usuarios, siempre debería ser igualmente fácil optar por no participar. No se puede pasar por alto el valor de la opción de exclusión voluntaria en una situación con una configuración predeterminada: no solo permite enviar mensajes transparentes, sino que también va un paso más allá al garantizar que los usuarios estén considerando detenidamente la intervención, con lo que se espera que influya. cambio de comportamiento a largo plazo.
Conclusión
Utilizar el efecto de transparencia siendo sincero con los usuarios sobre los empujones y las técnicas de las ciencias del comportamiento debería ser el camino a seguir, no sólo por razones éticas, sino también para garantizar que no terminen siendo desencadenadas por la reactancia. Garantizar que los consumidores tengan la información adecuada para tomar decisiones informadas y la plena libertad para elegir lo que mejor les funcione puede crear valor real tanto para los bancos como para los usuarios a fin de generar confianza y valor para la relación a largo plazo.