El término Interfaces de Programación de Aplicaciones (API) surgió por primera vez a principios de la década de 2000 en el contexto de las tecnologías web. Uno de sus usos más destacados fue permitir que empresas como eBay, Amazon, Salesforce y muchas otras integraran sus servicios en los sitios web de los clientes. Desde entonces, las API se han convertido en una herramienta habitual para los desarrolladores que les permite crear aplicaciones de software y otros servicios digitales.
¿Qué son las API?
Una interfaz de programación de aplicaciones (API) es un conjunto de herramientas y protocolos que hacen posible que los dispositivos digitales, las aplicaciones de software y los servidores de datos interactúen y se comuniquen entre sí.
Las API permiten que su producto o servicio se integre con otros productos y servicios de una manera segura, sencilla y flexible. Las API facilitan a los desarrolladores la creación de productos y servicios al proporcionar bloques de construcción simples que eliminan la necesidad de escribir todo el código desde cero. Esto significa que los desarrolladores pueden acelerar sus procesos y centrarse en el producto que están creando sin tener que preocuparse por la compleja funcionalidad de back-end de las API.
Tipos de API
Hay tres tipos principales de API que se utilizan comúnmente:
- API internas
Se trata de API privadas que solo se utilizan dentro de una solución u organización determinada para mejorar los procesos internos.
- API de socios
Los socios externos seleccionados pueden acceder a las API de socios y luego proporcionar productos o servicios al usuario final.
- API abiertas/públicas
Este tipo de API hace que los datos y servicios comerciales estén disponibles para cualquier tercero.
¿Cómo utilizan las API los bancos?
Las API han transformado la forma en que los bancos y terceros trabajan juntos al permitir el intercambio seguro de datos de clientes de acuerdo con las iniciativas y regulaciones de banca abierta.
Open Banking se refiere al intercambio seguro de datos y servicios financieros bancarios con terceros a través de API abiertas que les permiten desarrollar productos financieros.
Tanto los bancos tradicionales como los nuevos participantes de la industria han estado utilizando API abiertas para crear nuevos productos y servicios para los clientes simplificando el proceso de integración con fintechs de terceros y otros proveedores de servicios financieros y compartiendo datos de clientes de acuerdo con los requisitos de la banca abierta.
¿Cuáles son los beneficios de las API en la banca?
- Simplificar tareas
Las API simplifican la tarea de compartir datos y servicios al permitir que diferentes plataformas, aplicaciones y sistemas se conecten entre sí. Esto permite ahorrar tiempo que, de otro modo, se necesitaría para crear productos y servicios desde cero.
- Servicios mejorados
Los clientes esperan disfrutar de una excelente experiencia bancaria en línea y existe una demanda cada vez mayor de mejores productos y servicios bancarios. Con API abiertas, los bancos pueden crear mejores experiencias en los canales digitales mediante la integración con recursos internos y externos.
- Continúa la innovación
En el ámbito de la banca digital, las cosas pueden cambiar rápidamente. Para los bancos más pequeños, mantenerse al día con el ritmo de cambio es manejable, pero para las organizaciones más grandes puede ser complicado. Las API permiten a las instituciones financieras adaptar sus estrategias más rápidamente, al tiempo que aprovechan las oportunidades y se mantienen al día con las expectativas cambiantes de los clientes.
Las API están transformando el espacio bancario y aumentando la tasa de innovación en la industria. Al adoptar API, los bancos pueden transferir datos de forma segura y cómoda, ofrecer nuevos productos y servicios a los clientes y cumplir con los requisitos de la banca abierta.
